viernes, diciembre 18, 2015

La democracia se fue de Grecia


     Si no he escrito todavía acerca del tema griego, no es por falta de ganas ni de ideas. La verdad es que si uno mira la película que nos han presentado en el circo europeo la mayoría de nosotros podríamos definir la experiencia como “estupefacción”. Como tal, dentro de esa estupefacción salían a flote sensaciones de carácter visceral, nada positivas dicho sea de paso, influenciadas mayoritariamente por sugestiones ideológicas personales. Cuando ello ocurre, la causa en la inmensa mayoría de los casos es la falta de comprensión de los hechos, que deriva inevitablemente en esa sublime ignorancia socialmente aceptada llamada “todología”.

    Durante este último tiempo me he preocupado de recoger algunos datos, opiniones y discursos simplemente para conocer el contexto de las “supestas” negociaciones. Después de dos rescates por los que todos nos cargamos de razones para decir “qué generosa es la UE, luego devolvednos lo prestado” parece ser que la broma es bastante patente. En primer lugar, merece un primer apunte los ministros de economía del famoso Eurogrupo, de nombre menos original que los contenidos de la prensa rosa pero a su par en cuanto al ridículo que hacen. Por supuesto, con el señor de Guindos incluido, que aún creía que le iban a elegir su presidente por dejarse dar collejas y arrastrarse vergonzosamente por esos ambientes. Se podría empezar con el simple hecho de que cuando en un momento dado se vieron absolutamente acorralados por sus propias acciones en el tema griego (incluso los estatutos internos de la UE las definen como ilegales) lanzaron aquel tan puberal argumento de “el balón es mío y me lo llevo”. Bueno, realmente no fueron esas palabras exactas, pero se autodefinieron como reunión informal, ergo fuera de la esfera de dichos estatutos, y por lo tanto, no sujetos a sus leyes.... aunque deciden los temas económicos importantes que en la UE se dirimen.

    Con semejante desfachatez y sinvergonzonería desde el comienzo, debemos echar un ojo al holandés Jeroen Dijsselbloem, su presidente. Todo el mundo pensaría que es miembro del club de los políticos moribundos, es decir, Merkel, Rajoy y compañía. De la derecha más costrosa y purulenta, en definitiva. Pues no. El también ministro de finanzas holandés es militante, agarrense que esto es de traca, del PVDA (Partij van de Ardbeid o Partido del trabajo). Una suerte de partido socialista mayoritario que gobierna, o que más bien que utilizan para gobernar, en coalición con sus buenos amigos del VVD del presidente Rutte, el equivalente naranja al Partido Popular. Fuera ya de las perspicacias que esta antinatural alianza puedan suscitar en España por su factibilidad si las cosas llegan mal dadas, nos postramos en Europa ante un político que se define como socialista, y que al mismo tiempo es capaz de obligar a aplicar autoritariamente medidas profundamente neoliberales como si hubiera sufrido un exorcismo fallido del espíritu de Ángela. Por no hablar de su supuesta implicación en la ingeniería económica de evasión de impuestos... pero eso es otro cantar, o más bien un dueto con su buen amigo el señor Juncker.

    En fin, ni que decir tiene que si describieramos uno a uno a estos chavales neolibrepensadores que quedan en su tiempo libre a divagar en el “Café Comercial” de Bruselas , aparte de no dejar a casi ninguno vivo, tampoco conseguiría llegar al objetivo de este texto. Vamos a dar unas cuantas cifras de Grecia, para ir calentando. En los dos primeros “rescates” (de 110.000 y 240.000 millones respectivamente), aproximadamente sólo un 10% de la cuantía total del dinero se invirtió directamente en Grecia. El resto del montante, esto es un 90%, fue a parar (adivínelo querido amigo) a los bancos que “desafortunadamente” eran casi los únicos poseedores de deuda griega. Si concretamos un poco más, cerca del 70% del dinero correspondía a aquellas entidades de nacionalidad francesa y alemana, con lo que el publicitado rescate europeo podríamos considerarlo sin muchas dificultades como un rescate bancario encubierto a Francia y Alemania. Aunque hay algo que no me cuadra, ya que una de las máximas del neoliberalismo imperante es que el estado no debe intervenir en la economía. Si tal es así, ¿cómo es posible que no sólo un estado, sino 28, hayan impedido la quiebra de varios bancos privados? Le dejo al lector la libre interpretación del asunto.

    Sigamos. El Producto Interior Bruto o PIB, esa manipulable cifra encargada de decirnos cuánto “vale” un país en las altas esferas, a descendido en Grecia desde 237 mil millones en 2009 (un año antes del primer “rescate”) con una deuda pública que equivalía al 126,8% del mismo, hasta 179 mil millones a finales de 2014, con un incremento de hasta el 180% de dicha deuda a comienzos de 2015. Desde ese año 2009, el paro, que se encontraba en torno al 9,3%, ascendía hasta el 25,4% al comienzo del primer trimestre de 2015, incluida una reducción del número de funcionarios públicos de aproximadamente el 25%. Digno de mención es que Syriza (el partido de Tsipras), llegó al poder en Enero de 2015, pero aquí los miembros de la secta de la gaviota no consideran las herencias recibidas a la hora de criticar al susodicho partido. Volvamos mejor al argumento principal, que me devío. El salario mínimo interprofesional griego ha descendido en los últimos años desde los 818 hasta los 684 euros al mes, acercándose peligrosamente al español (aprox. 648 euros/mes). A pesar de lo ridículamente ínfimo de esta cifra (que alguien me diga cómo se puede vivir “normalmente” con ese dinero), decir que el 45% de los pensionistas griegos cobran por debajo de los 665 euros al mes... vaya... pero, ¿la historia no era que los griegos tenían unas pensiones muy altas y que por eso la crisis les había azotado más que a ningún otro país? ¿No nos decían hace no mucho que era más que imprescindible reducir su cuantía para poder sostener la economía de Grecia? Aunque, si una parte importante de estas pensiones han bajado más del 48% desde el comienzo de la crisis, ¿por qué hay que cebarse más en recortes de este concepto? Me parece que los mayores griegos lo van a pasar soberanamente mal debido a la crisis de su deuda soberana....

    En resumen, si después de leer este texto sigue usted, mi querido lector, pensando que los recortes a Grecia son justos, claramente carece la imprescindible cualidad humana llamada empatía, cuya ausencia deriva en muchos de los trastornos calificados por la psicología moderna como psicopáticos. Aun así, debido a que no me interesa ensalzarle sus alteraciones maníacas de autoestima, una pregunta sobrevuela majestuosamente sobre las demás : ¿Por qué entonces Tsipras ha aceptado un memorándum de recortes sólo una semana después de que su pueblo le dijera en las urnas que no lo hiciera?

    Si escuchamos a los griegos, muchos dicen que a Tsipras no le dejaron más opciones y tuvo que aceptar aquel suicidio. Me parece una explicación coherente ya que si no no le hubieran vuelto a votar en las recientes elecciones generales. Con un 80% de griegos que quiere seguir siendo parte de la UE, poco más se puede hacer si eres un gobierno responsable que respeta los deseos de la gente a la que representas. En cualquier caso, es una respuesta que quien quiera que se la crea, porque el abanico de explicaciones que se han abierto en los últimos meses es de traca. Podemos empezar por las más extremas, que no por ello igualmente coherentes. Si hacemos caso al señor Rosenthal, hemos presenciado una situación parecida a la del ex-primer ministro sueco Olof Palme. Recordemos que este personaje fue asesinado en 1986 por un desconocido cuando volvía del cine con su mujer. Muchas las hipótesis de la inconclusa investigación apuntaron a un movil político (servicios secretos israelíes, Pinochet, los Kurdos, la utltraderecha....), como el que le pudieron sugerir a Tsipras ciertos neolibrepensadores si no aceptaba el memorandum. Podríamos contarlo de esta manera: "Alexis...mira chato. Tómate un descanso y vete mañana a ver Star Wars con tus hijos. Que el lunes ya si eso, nos reunimos otra vez y resolvemos lo del referendum" Muy simple.

    Por otro lado, si hay un hecho que destaca por sospechoso es el del Fondo Monetario Internacional (FMI). ¿Por qué justo un día después de la aprobación del memorando declara oficialmente a través de Lagarde y Dragi que la deuda griega es insostenible y que habría que plantearse una reducción sine qua non? ¡Solo un dia después! Hay quienes lo explican de esta manera: están preparando el bastante plausible escenario de la quita. De esta forma, la todo poderosa Merkel justifica ante su partido/votantes/país/Europa que ha sido todo lo dura que ha podido con el tema griego, pero que desde el FMI le obligan. Por otro lado, Tsipras se vanagloria ante su gente con la consecución de una de sus aspiraciones. Es decir, nadie es responsable de nada, y así todos contentos. Vamos, una farsa más.

    La última de las opciones plausibles es que le entró vértigo por el cariz que estaban tomando los acontecimientos, y perdió el valor que hasta entonces había exhibido. No es descartable, por supuesto que no.

    Por último, queda resaltar la siguiente noticia: “Una empresa alemana se adjudica la primera privatización del gobierno de Tsipras (Diario público, 18 deAgosto de 2015)... curioso, ¿no? Precisamente alemana... sobran comentarios, aunque es digno de mención que si tenemos en cuenta que el acuerdo se escenificó un 11 de agosto del 2015, han tardado bastante poco en empezar de nuevo el saqueo. Además, no es una privatización cualquiera. Si todo el mundo asiente condescendiente ante el hecho de que, hoy por hoy, Grecia sólo puede vivir de los ingresos del turismo, la susodicha empresa alemana se queda con la concesión de 14 aeropuertos del país heleno... ¡Ah! Que no. Que ya no pueden vivir tan “holgadamente” del turismo...

    Pues nada señores. Esa es nuestra amiga la Unión Europea, una zona de exclusión donde la libertad, la fraternidad y la igualdad de la revolución gala se practica sin restricción. Afortunadamente, este domingo puede empezar el cambio. Al menos en uno de los hasta ahora fieles socios sureños de los chavales neolibrepensadores.



miércoles, julio 01, 2015

Una semana cualquiera en España



A colación de lo que comentaba en la anterior entrada, no hay más que mirar una semana normal el periódico. Resulta que el pasado día 10 de Junio, en el parlamento europeo se sometía a votación si se debatía el poco conocido, que no por ello menos peligroso, TTIP (Transatlatic Trade and Investment Partnership), un acuerdo a través del cual la ideología neoliberal encuentra su clímax reduciendo al mínimo las regulaciones e impuestos de las transacciones entre EE.UU. y Europa. En definitiva, una suerte de libre comercio entre las susodichas potencias. Y digo terrible porque dentro de las avanzadísimas negociaciones, las cuales se han llevado a espaldas de la población sin que supiéramos hasta hace bien poco siquiera que existían, se maneja la posibilidad de que un tribunal supra-nacional resuelva los posibles conflictos que amenacen los beneficios de las corporaciones: el ISDS (Investor-State Dispute Settlement). Por lo tanto, tal cual está planteado, ninguno de los gobiernos incluidos en el tratado tendría potestad de rechazar o recurrir una resolución del mismo. Aparte de la lógica pérdida de soberanía que ello supondría, nos quedamos expuestos a que unos jueces que no son elegidos públicamente resuelvan a favor de las compañías en los términos que maneja el dinero, independientemente que sea o no justo para la población. Un ejemplo: imaginémonos por un momento que, después de la aprobación del TTIP, la tristemente famosa compañía Monsanto decidiera recurrir la prohibición de comercialización de alimentos transgénicos en Europa (decir, por aclarar, que el TTIP per sé ya contempla una relajación de la legislación al respecto de la venta y producción de estos alimentos en Europa). Seguramente no ando demasiado desencaminado si aseguro que usted, lector, estará absoluta e irremediablemente en su contra, debido a que repite como un papagallo lo que la televisión difama o lo que otros grandes medios de difusión han mentido. Símplemente decirle que, si se informa un poco (sólo un poquito), lo único que encontrará detrás de la demonización de los transgénicos es pura ideología, superstición y absolutamente nada de pruebas punibles. Pero bueno, eso es objeto de otro cantar. Imaginémonos también que, en base a la pérdida de beneficios que ello le supone a la compañía, el ISDS resuelve a su favor y a partir de ese momento, encontraremos a nuestros amigos los transgénicos mejor representados en las estánterías de nuestros supermercados. Tremendamente fácil y sin posibilidad de que nuestro amigo Mariano pueda decir nada (¿lo haría a través de un televisor de plasma?). 
 

Así las cosas, volviendo a la votación en el Parlamento Europeo, nuestros amigos de la secta de la gaviota se opusieron en pleno a que el debate tuviera lugar. Como se dice en ciertos foros, el Partido Popular juega las cartas de la democracia únicamente cuando éstas están marcadas. Grave es igualmente lo sucedido con sus congéneres de la rosa. Aparte de votar la semana anterior a favor de una enmienda que no rechazaba explícitamente el arbitraje del ISDS, los 5 diputados que asistieron a la votación (de un total de 14) se abstuvieron, posponiendo definitivamente el debate (183 a favor, 181 en contra, 37 abstenciones). Para las mentes cuya capacidad de cálculo no se desarrolló convenientemente, únicamente con 3 diputados más que hubieran votado a favor, hubieramos tenido una exposición pública de tremendo engorro. En definitiva, es un gran logro para ese partido que supuestamente defiende unos ideales socialistas por y para la población, alcanzando cotas de cinismo poco antes vistas. 

Pero, ¿qué le vamos a hacer? Ellos se consideran a sí mismos el vehículo del cambio.... Siguiendo con el repaso de la actualidad tenemos el tradicional caso diario de corrupción del PP, que envuelve a la nueva flamante presidenta de la comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes. Ponemos en situación. Plaza Cristo Rey, nº7. Ahí se encuentra situado un solar propiedad de la Universidad Complutense de Madrid. Para aquellos que no lo asocien, traduzco: suelo público. En Febrero de 2013, se convoca a concurso la construcción y gestión por 50 años de un nuevo Colegio Mayor en dicho lugar. Para no aburrir con las cifras millonarias que se manejan, la empresa adjudicataria Castellana Management S.L. contrata a su vez a un promotor delegado para la construcción del edificio. Este promotor delegado es Rya Residencias, que está en propiedad de un tal Dionisio Ramos. Dicho personaje, que fue gerente de la Universidad Complutense entre 1999 y 2003 (¿A alguien no le viene a la cabeza automáticamente las palabras “Conflicto de intereses” y “Tráfico de Influencias”? ¿Cómo un ex-gestor de la Universidad puede siquiera optar a tal proyecto?), también hizo sus pinitos en la máquina de hacer dinero llamada Gürtel. Para hacer la historia un poco más corta, en uno de los papeles del impresentable personaje Francisco Correa figura el “Dioni” como comprador de acciones de una empresa de su propiedad. Sólamente para completar el paquete, el escolta de Eduardo Tamayo (sobran las presentaciones) le señaló como uno de los responsables de la seguridad del parlamentario tras el golpe de estado (más bien, golpe de “comunidad autónoma”). Una vez hechas las pertinentes descripciones, vamos a hacer un ejercicio práctico sencillo, del nivel de un niño de parvulario diría yo. Encuentre, amigo o enemigo lector, los nombres resaltados en negrita de este párrafo. Escríbalos juntos en una columna y escriba en otra el nombre de la presidenta de la Comunidad de Madrid. Ahora, únalos con una flecha si es tan amable y tendrá ante sus ojos un esquema fidedigno de las amistades que la señora Cifuentes hace gala. ¿Y ésta es la persona que dirigirá la suerte de los Madrileños durante los próximos años? ¿Sómos los Madrileños (y no sólo ellos... no hay más que ver el resto de las comunidades y ayuntamientos) una suerte de Síndrome de Estocolmo? ¿Dónde se queda la calidad nuestra capacidad de elección? Yo se lo responderé con otra pregunta querido amigo: ¿Qué capacidad de elección? …. Yo no la veo por ninguna parte.

Por lo demás, me he propuesto, estimado visitante de mi modesto blog, escribir más a menudo y por lo tanto entradas más cortas. El problema es que si me pongo a hablar de la incrustación de la corrupción en la vida política de este país, se me quedan en el tintero otros asuntos igualmente graves que ocurrieron (como reza el título de esta entrada) en una semana cualquiera en España. Por resumir, qué podemos decir del penoso viaje del señor Felipe González a Venezuela en defensa de los derechos humanos. Fuera de la honorabilidad que ello conlleva, es imposible no hacer mención al cinismo del que hace gala. No nos olvidemos que el susodicho personaje fue responsable de su incumplimiento, cuando unos personajes que no merecen ser nombrados publicitaron de manera muy efectiva 3 simples letras bajo la tutela del señor González: GAL. Muchas compañías de márketing deberían estudiar el fenómeno para ver si pueden colocar tan exitosa en el mercado sus respectivos productos... Podría haber ido igualmente a China o a uno de los múltiples países Africanos en donde las dictaduras aún imperan a sus anchas.... pero eligió Venezuela en año electoral. Además,nunca había visto una covertura tan intensa por parte de los grandes medios de comunicación y de persuasión (como los denomina Vicenç Navarro) de un viaje de un expresidente a un país supuestamente insignificante de sudamérica... Parece ser que el Partido Socialista, ante la ausencia de argumentos, necesita recurrir a tristísimos artilugios. Igual que hablábamos hace un momento del Síndrome de Estocolmo, ahora podríamos acuñar uno nuevo (que la gaviota lleva padeciendo desde hace un tiempo, dicho sea de paso): el Síndrome Podemítico Sistémico.


También se podría describir ampliamente la profunda vergüenza ajena que me supuso enterarme que un debate sobre el fin de la banda terrorista ETA, en el cual se abordaron algunos de los importantes flecos pendientes del proceso de paz en el País Vasco y, por extensión, en España, no tuviera lugar en el Congreso de los Diputados de Madrid (o en alguna de las capitales vascas) y sí el pasado 11 de Junio en París. Para mayor vergüenza, la sede de nuestro poder legislativo se negó en rotundo a escuchar los testimonios de las víctimas un par de semanas antes y sobra decir quién tiene la potestad para impedir este tipo de eventos. Parece ser que aún hay quien se lamenta de que no se pueda usar nunca más el terrorismo como arma política arrojadiza y se justifica con el más que oportuno hallazgo unos días antes de un arsenal de armas y la detención de dos personas. Es un buen gesto para sellar la paz, ¿no?



Pero bueno, como he dicho, esta es sólo una semana cualquiera en España y parece que a su pueblo, los españoles, les parece estupendamente todo este tipo de indignantes espectáculos. En definitiva, colaboradores necesarios de toda la porquería que nos asola.

miércoles, junio 10, 2015

País de sordos, País de mudos



Efectivamente si algo caracteriza a España, es el ser un país que escuchar no escucha mucho y responder a lo que se pregunta (primera norma de respeto de todo buen Cristiano que se precie) no es moda. Bueno, exceptuando las altas esferas gubernamentales de los últimos años, donde el señor De Guindos y el señor Rajoy sólo escuchan a Ángela y asienten sin réplica. Por lo demás, se pueden esbozar múltiples situaciones para deleitarnos. Ante la rogativa al señor Montoro de la lista de los acogidos a la amnistía fiscal, la gestión de don José Luis reaparece de forma “ytumasista”. Cuando a nuestra Esperanza de todos los Madriles se le comenta que los granados están en flor, aparece un “tú eres ETA”. O cuando los televisores de plasma se publicitan en las ruedas de prensa del gobierno y... bueno, no hay escucha ni por supuesto respuesta del interlocutor. Vamos, que al final, la evolución darwiniana tiene el capricho de que la raza humana que habita en la Península Ibérica carezca de cuerdas vocales y tímpano.

En cualquier caso, lo peor de todo es que sindecir ni escuchar, echamos nuestro papelito en una urna y ¡uy! La mayoría absoluta más grande de toda la historia. O como el pasado día 24 de mayo, por el que la gaviota sigue sobrevolando nuestras comunidades y ayuntamientos a pesar de contar sólo con un ala. Incluso, sus compañeros de fatigas de la rosa aún mantienen un par de pétalos. Por mucho que se trate de justificar mediante la dificultad de acceso a la información por la carestía tecnológica digital existente en pueblos de la España profunda, o por la ausencia de más partidos en el espectro ideológico de la derecha (aceptando el marco político anglosajón), es inexplicable la cantidad de votos que unas organizaciones/mafias tan dañinas hoy para el pueblo español han conseguido en las pasadas elecciones. Al parecer, van a tener razón aquellos que decían que en política no sirve decir la verdad únicamente. No sirve demostrar con datos que el empleo no se ha creado, sino que se ha fragmentado. Es inútil repetir hasta la saciedad que se prometieron 3,5 millones de trabajos nuevos en una legislatura y 4 años después nos encontramos con 300.000 parados más según las últimas Encuestas de Población Activa. Es un gasto de saliva inútil gritar a los cuatro vientos que según el INE, la pobreza en España ha subido del 24% en 2008 al 28% en 2013 y el de pobreza severa del 3,5% en 2007 al 6,4% de la población total en 2012, mientras que los pobrecitos rescatados bancos vuelven a declarar millones de euros en beneficios. Mención aparte tienen los Gurtel, Bárcenas, caso ERE y Púnica... Pero bueno, no sé por qué me extraño si, sabiendo que el 1% de las personas más ricas de nuestro querido país posee tanto como el 70% de la población, todos los fines de semana nos sentamos delante de la televisión a seguir manteniendo los sueldos multimillonarios de unos jovencitos corriendo delante de un balón. Éstos son sólo unos pocos datos que están a disposición de cualquiera pero, de nuevo, el empirismo es una fe. Comienzo por lo tanto a plantearme seriamente que la capacidad intelectual o la madurez cognitiva de una parte importante de los españoles se encuentra bajo sospecha, siendo bastante sutil. No hay que ser demasiado inteligente para reconocer de manera simplista que, en los últimos años, el país ha entrado en una quiebra técnica sin precedentes afectando negativamente al nivel de vida de las personas, y que Partido Popular y Partido Socialista han sido los responsables de manejar las riendas. Por lo tanto, a la vista de los acontecimientos y dentro de una lógica demócratica sana, lo más lógico sería decir: “no voy a votar a ninguno de ellos”. Pero no. Más de un 50% de inconscientes votantes eligen a estas formaciones políticas, y seguro que dentro de unos pocos días estarán despotricando contra los mismos dirigentes que ellos mismos han elegido. No hay más que ver la esperpéntica situación de 2012, cuando se convocó una huelga general sólo 4 meses después de haber concedido una mayoría absoluta sin parangón al Partido Popular. No sin razón, pero bochornoso en cualquier caso.

Aceptémoslo. Esa es la marca España. País de sol, playa y corrupción porque su gente, y sólo su gente, así lo quiso. Dejémonos de tonterías del tipo “manzanas podridas hay en todas partes” y comencemos a reconocer la co-responsabilidad intrínseca y esencial del votante en la incrustación de la corrupción en nuestras instituciones. A pesar de que todo el mundo lo sabe y la todología encuentra en ello su apogeo, se sigue eligiendo a politicuchos sin moral alguna perpetuando un sistema gubernamental degenerado. En definitiva, un país de sordos y un país de mudos, aunque... ¡qué guapas están las infantas!